
Una de las cosas que más me gustan de trabajar en Holanda, es la flexibilidad que existe para conciliar tu vida personal con la profesional. Y es que trabajar desde casa, cada vez es más habitual 🙂

Tu aterrizas aquí con tu mentalidad ¨obsoleta¨ de lo que has conocido y experimentado en tu país. Y cuando pasan varios meses te das cuenta precisamente, de eso, de qué estructura de trabajo tan atrasada y arcaica que tenemos.
Recuerdo el primer mes de trabajo en Holanda algo estresada. Tenía que buscarme un apartamento para vivir, sin embargo las inmobiliarias hacían horario de 9 a 5. ¿Cómo iba ir a buscar si hacían el mismo horario que yo tenía?.
Al ver el panorama, fui al jefe a explicarle la situación. Propuse que en todo caso, me cogía ya horas o días a cuenta de vacaciones, porque si no, no sabía cómo iba a hacerlo!
Él sin embargo me miró, sin entender muy bien mi cara de pánico por el tema que le estaba explicando.

Me dijo tranquilamente, que ya contaban que necesitaría mi tiempo hasta instalarme, y que no tenía por qué gastar vacaciones para esto, siempre y cuando no dejara mis tareas o temas urgentes desatendidos. Tomaaaaaa!
Y esta es la clave de la flexibilidad holandesa: se trabaja por objetivos y resultados, y no por las horas que estés sentada en la oficina.
Es decir, tendrás unas tareas asignadas, probablemente con unas fechas de entrega determinadas. Y esto es lo que primará, que atiendas tu trabajo, las reuniones, y los plazos establecidos.
Evidentemente, hay una estructura de horario que suele oscilar de 9 a 5,30 de la tarde, con media hora para comer. Pero siempre flexibles a la situación personal de cada uno. Sobre todo lo verás en los que tienen hijos.
Aquí no es tan común que los abuelos se hagan cargo de atender a los nietos diariamente. Por lo que las familias se tienen que organizar para atender a sus hijos. Más o menos, cada uno pacta la jornada laboral para poderla combinar con la vida personal.

Todo dependerá también del tipo de trabajo que tengas, si es cara al público será mucho más difícil poder hacer esto. Cada empresa lo aplicará en mayor o menor medida, pero muy mala suerte tendrías que tener para no notar ya una mejoría en cuanto al tema de flexibilidad horaria.

De hecho, hace solo unas semanas que se ha aprobado la nueva legislación respecto a este tema. Los trabajadores tendrán derecho a pedir cambios de horarios, reducir o extender sus jornadas, y los empleadores solo lo podrán rechazar si justifican que puede influir en una mala calidad del trabajo.
Yo veo como mis compañeros de trabajo, tanto hombres como mujeres, se re-organizan el horario para ir a los festivales del cole de sus hijos, o a acompañarlos a piscina, o trabajar desde casa si es necesario…y no pasa nada, ni nadie te mira mal.

A mí me parece realmente bonito. Y comparo con cuando trabajaba en Barcelona, qué mal lo pasaban las madres trabajadoras por perderse estos eventos!
Hacer horas extras tampoco está muy bien visto, puedes tener algo puntual, pero no como dinámica, y mucho menos si no son retribuidas. Así que no te de “verguencilla” de soltar el boli a las 5.30pm, mañana será otro día!
A lo primero choca, pero luego verás que es lo normal, y que lo que no era normal era lo que habías estado haciendo hasta antes de llegar aquí.
Realmente, me parece fantástico!
Y a ti?
Rosa
Las horas extra están remuneradas?
Gracias.
Hola Paloma, pues depende del tipo de trabajo, pero en fábricas y en el sector limpieza por lo que tengo entendido sí que se tienen en cuenta. Si es un trabajo de oficina no se pagan porque en teoría tampoco esperan que tengas que hacer horas extras. Un saludo. Rosa
Me parece una maravilla esta flexibilidad de los jolandios!
He trabajado en un par de oficinas con jornadas de 9 a 5 y al principio me chocó mucho acostumbrarme a la flexibilidad.
Pero creo que lo mejor de todo es la posibilidad de hacer horas desde casa. Cada día nos vamos digitalizando más y no es necesario ir a la oficina!